El conflicto entre Israel y Hamás ha experimentado un breve período de tregua, marcado por la liberación de tres rehenes israelíes a cambio del lanzamiento de 183 presos palestinos.
Este canje representa el cuarto intercambio enmarcado en el acuerdo de alto el fuego que busca mitigar la violencia en la región.
Los rehenes liberados son Ofer Calderon, Keith Siegel y Yarden Bibas.La liberación de Calderon y Bibas se produjo en Jan Yunis, mientras que Siegel fue puesto en libertad en el puerto de Gaza.
El reencuentro con sus familias ha sido un momento emotivo, aunque doloroso para Yarden Bibas, cuyas esposa e hijos permanecen cautivos.
El reencuentro de Yarden con su familia es sencillamente desgarrador, declaró el presidente de Israel, Isaac Herzog, manifestando su preocupación por el destino de Shiri Bibas y sus hijos Ariel (5 años) y Kfir (2 años).
Herzog advirtió sobre la gravedad del asunto, recordando las amenazas de Hamás de no liberar a los niños en las primeras etapas del intercambio.
Muchos temen que hayan muerto, dijo Herzog.
En este intercambio, Israel liberó a 183 presos palestinos, incluyendo 111 arrestados durante la guerra sin cargos formalizados.
De ellos, 143 fueron devueltos a la Franja de Gaza, 32 fueron liberados en Ramala (Cisjordania) y otros ocho están sujetos a deportación forzosa a través de Egipto.
El acuerdo también incluye el traslado de 50 gazatíes heridos y enfermos, la mayoría niños con tres adultos excepcionales, quienes cruzarán al Egipto para recibir tratamiento médico a través del cruce de Rafah, que fue cerrado tras la operación militar israelí el 7 de mayo.
Este intercambio de rehenes y presos representa un intento por aliviar la tensión en Gaza, aunque las preocupaciones sobre el destino de los niños cautivos persisten.
La comunidad internacional continúa vigilando la situación con atención, esperando que este paso sea el inicio de un camino hacia una paz duradera.