El Vaticano ha informado este sábado sobre un progreso positivo en la salud del papa Francisco durante su ingreso en el Hospital Gemelli de Roma.
El Pontífice ha pasado una noche tranquila y ha descansado adecuadamente, según ha comunicado el servicio de prensa vaticano.
Esta noticia llega después de que los médicos reportaran una leve mejoría en sus análisis de sangre a última hora del miércoles, generando un respiro en la comunidad internacional.
A pesar de la mejora, el doctor Sergio Alfieri, cirujano general del hospital Gemelli, reconoció este viernes que el papa no está fuera de peligro y recalcó que está mucho mejor de cómo llegó, añadiendo que el propio Francisco es consciente de la gravedad de su situación.
El Papa, quien se encuentra bajo tratamiento por una neumonía bilateral derivada de una bronquitis, presenta fragilidad debido a su avanzada edad, según los médicos.
A pesar de ello, su vida no está en riesgo, y continúa demostrando su fortaleza ante la adversidad.
Francisco mantiene un espíritu positivo y sigue desempeñando sus tareas pastorales, incluyendo el trabajo, la lectura y la recepción de llamadas telefónicas.
Su resiliencia y optimismo son un consuelo para los millones de personas que oran por su pronta recuperación.
