Apuestas Educativas para el Auge Minero de Salta

La provincia de Salta se encuentra en vilo por un inminente auge minero que promete transformar su economía en las próximas décadas.

Para aprovechar al máximo este potencial, el gobierno provincial ha emprendido una estrategia educativa orientada a formar una fuerza laboral calificada capaz de satisfacer la demanda del sector.

Diego López Morillo, subsecretario de Educación y Trabajo de Salta, destaca la riqueza de la oferta educativa técnica que ya existe en la provincia: Salta cuenta con más de 70 escuelas técnicas, más de 500 cursos de formación profesional y unos 40 institutos técnicos superiores que ofrecen tecnicaturas.

Ante la llegada del auge minero, se ha implementado un proceso de adecuación para que esta oferta educativa se alinee con las necesidades específicas del sector.

El Ministerio de Educación de Salta ha colaborado estrechamente con la Secretaría de Minería, la Cámara de Minería y empresas privadas para identificar los perfiles profesionales más demandados.

Lo primero que hicimos fue comunicarnos con la Secretaría de Minería, que elaboró el Plan Minero Provincial, donde el primer capítulo está dedicado a la educación y capacitación de trabajadores, explica López Morillo.

Este análisis ha permitido detectar la necesidad de incorporar contenidos específicos relacionados con el sector minero en los diseños curriculares de las escuelas técnicas.

Por ejemplo, se ha reforzado la enseñanza química con énfasis en el litio, recurso fundamental para la industria minera de la región.

Otra prioridad es la formación en oficios especializados que no siempre están cubiertos por el sistema educativo tradicional.

Hablamos de mantenimiento de maquinaria pesada, conductores de camiones para alta montaña, auxiliares perforistas, entre otros perfiles, enumera López Morillo.

Para cubrir esta demanda, se han establecido convenios con empresas privadas que aportan docentes especializados y entornos formativos adecuados.

No podemos enseñar a perforar sin contar con las máquinas perforadoras, por eso es clave la participación del sector privado, subraya el subsecretario.

De la formación técnica, también se impulsan cursos específicos sobre habilidades blandas, higiene y seguridad, emprendedurismo y elaboración de currículum.

El impacto de estas medidas ya es visible: en el anuario de minería se menciona que ya han egresado más de 1.500 personas en distintos oficios vinculados a la minería, destaca López Morillo.

La meta del gobierno es seguir aumentando esta cifra y garantizar que la mayor cantidad posible de trabajadores del sector sean salteños.

Uno de los mayores desafíos sigue siendo la inserción laboral de los jóvenes egresados.

Para afrontar este reto, el Ministerio impulsa prácticas profesionalizantes y pasantías en conjunto con el sector privado.

Queremos que la mayor cantidad posible de estudiantes del último año de educación técnica puedan acceder a una práctica profesional antes de egresar, asegura López Morillo.

A pesar de estos desafíos, la iniciativa educativa para impulsar el auge minero se presenta como un modelo exitoso de articulación entre el Estado, el sector privado y la comunidad educativa.

La formación de profesionales cualificados es fundamental para que la minería en Salta sea un motor de desarrollo económico sostenible e inclusivo para toda la provincia.