Torrenciales lluvias que azotaron la región durante el último miércoles han dejado un saldo significativo de daños en las rutas nacionales 40 y 68, obligando a Vialidad Nacional a emitir recomendaciones urgentes a los conductores.
El arrastre de piedra y barro producto de las intensas precipitaciones afectó severamente la Ruta Nacional 40 entre los tramos de Tolombón y la frontera con Tucumán.
Equipos especializados trabajan arduamente desde entonces para despejar la calzada, enfrentando aún las persistentes lluvias en la zona alta.
Las condiciones actuales son difíciles debido a la continuidad de las lluvias, declaró un portavoz de Vialidad Nacional.
Nos encontramos realizando los trabajos necesarios para restablecer la normalidad lo antes posible, pero pedimos a los conductores que extremen las precauciones.
No solo la Ruta 40 se vio afectada; en la Ruta Nacional 68, deslizamientos de tierra y piedras entre los kilómetros 72 y 82 obligaron a desplegar maquinaria pesada para garantizar la seguridad vial.
Trabajos de limpieza también se realizaron en puntos estratégicos de las rutas afectadas, como el km 4352 Río San Antonio, el km 4370 Baden de La Dársena y el km 4271 Río San Lucas.
El llamado a la precaución por parte de Vialidad Nacional es fundamental para evitar accidentes.Los conductores deben circular con especial atención, reducir la velocidad, respetar las señales preventivas y seguir las indicaciones del personal presente en la zona, indicó un especialista en seguridad vial.
Estas tormentas han generado una situación de incertidumbre para los usuarios de estas rutas vitales, afectando el transporte de personas y mercancías.