Las tensiones en la región continúan intensificándose luego de que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) interceptaran tres drones lanzados desde Yemen, según se atribuye a los rebeldes hutíes.
Este incidente, el cual fue confirmado por las FDI, representa un escalamiento significativo en la escalada regional tras los ataques del movimiento Hamás contra Israel el 7 de octubre.
Si bien no se ha emitido ninguna declaración oficial al respecto por parte de los hutíes, este acto evidencia una conexión directa entre la conflictiva situación en Yemen y el conflicto israelí-palestino.
Esta acción refleja una clara escalada de la amenaza que representan los grupos armados iraníes para Israel, declaró un analista de seguridad regional, quien prefirió mantener su anonimato.
El primer dron fue interceptado recientemente sobre territorio israelí, activando las sirenas antiaéreas.
Los dos restantes fueron derribados sobre el mar Mediterráneo antes de poder cruzar la frontera. A pesar de no haber penetrado en territorio israelí, estos incidentes generaron preocupación y temor entre la población civil.
La escalada de ataques por parte del grupo hutíes contra objetivos israelíes se produce en un contexto de creciente inestabilidad regional.
Desde el inicio del conflicto en Gaza, los hutíes han intensificado sus acciones, atacando buques con vínculos con Israel y lanzando misiles hacia territorio israelí.
Esta expansión del conflicto amenaza la frágil paz en el Mediterráneo Oriental.
La situación actual es extremadamente preocupante.
La escalada de violencia es un riesgo para toda la región y debemos trabajar juntos para encontrar una solución pacífica, manifestó un diplomático internacional, quien pidió no ser citado por nombre.