La tensión política en Corea del Sur alcanzó un punto crítico tras el intento fallido de arresto del presidente Yoon Sukyeol, destituido por el Parlamento por su tentativa fallida de declarar la ley marcial.
Park Chongjun, jefe del Servicio de Seguridad Presidencial (PSS), compareció ante la investigación conjunta sobre el caso y pidió que se evite cualquier conflicto físico o derramamiento de sangre durante un posible nuevo intento de arresto.
Creo que muchos deben estar profundamente preocupados ante la situación actual, con organismos gubernamentales enfrentándose entre sí, declaró Park a los medios al llegar a la sede del equipo investigativo.
No debería haber enfrentamientos físicos ni derramamiento de sangre bajo ninguna circunstancia.
La tensión se deriva del enfrentamiento entre los investigadores de la Oficina para la Investigación de Casos de Corrupción para Altos Funcionarios (CIO) y el PSS, que impidió el acceso a la residencia presidencial para llevar a cabo el arresto.
Esta situación ha generado una profunda división en el país, con diferentes grupos políticos defendiendo posiciones opuestas.
La investigación contra Yoon se centra en su intento de declarar la ley marcial, un delito por el que no existe inmunidad presidencial en Corea del Sur.
El presidente y sus abogados argumentan que el proceso judicial se está llevando a cabo de forma ilegal, ya que debería ser el Tribunal Constitucional quien primero emitiera un fallo sobre su destitución antes de cualquier investigación criminal.
En anteriores procesos de destitución presidencial, como el de Park Geunhye, se permitió que el Tribunal Constitucional emitiera su fallo antes de emprenderse una investigación criminal, afirma un portavoz del equipo legal de Yoon.
La CIO, entidad creada por el anterior gobierno liberal para reducir la influencia del ministerio fiscal bajo el mando de Yoon, está a cargo de la investigación junto con la Policía y el Ministerio de Defensa Nacional.
El Tribunal Constitucional deberá determinar si la destitución de Yoon es legal o no.Mientras tanto, el país se encuentra en un estado de incertidumbre política, con la posibilidad de un nuevo intento de arresto del presidente y la amenaza de una mayor polarización social.