El Departamento de Salud de Luisiana ha confirmado la primera muerte relacionada con el virus de la gripe aviar en Estados Unidos.
El paciente, un hombre mayor de 65 años con afecciones preexistentes, contrajo el virus al tener contacto con aves silvestres y domésticas.
A pesar de este trágico caso, las autoridades sanitarias enfatizan que el riesgo general para la población sigue siendo bajo.
Si bien estamos profundamente entristecidos por esta pérdida, es importante recordar que la transmisión del virus a humanos se mantiene en niveles bajos, declaró un portavoz del Departamento de Salud de Luisiana.
Continuamos vigilando de cerca la situación y recomendamos a las personas que trabajan con aves o tienen contacto frecuente con ellas que tomen precauciones para protegerse.
El caso ha generado preocupación entre los expertos debido a la presencia de mutaciones en el virus que no se han encontrado en las aves infectadas.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) están investigando estas mutaciones para determinar si representan un mayor riesgo de transmisión entre humanos.
Las mutaciones son una preocupación, ya que podrían aumentar la capacidad del virus para propagarse entre personas, afirmó doctora Jane Doe, epidemióloga de los CDC. Sin embargo, en este momento no tenemos evidencia de que el virus se esté transmitiendo de persona a persona.
El primer caso humano de gripe aviar en Estados Unidos fue reportado en diciembre, y hasta ahora se han confirmado más de 65 infecciones.
La mayoría de los casos se han registrado en California.
Los CDC advierten que las personas mayores de 65 años son más susceptibles de desarrollar complicaciones graves por la gripe aviar debido al debilitamiento del sistema inmunológico con la edad.