El presidente estadounidense, Donald Trump, ha generado controversia al otorgar indulto a 23 activistas antiabortistas que fueron condenados durante la administración del presidente demócrata Joe Biden.
La decisión, anunciada el lunes en el Despacho Oval de la Casa Blanca, ha sido recibida con elogios por parte de grupos pro-vida y críticas por sectores defensores del derecho al aborto.
No deberían haber sido perseguidos.Muchos de ellos son gente mayor.Es un gran honor firmar esto, declaró Trump al justificar su decisión.
El indulto se produce en el contexto de la próxima Marcha por la Vida, un evento anual que reclama el fin del aborto y que se espera que sea transmitido por el presidente a través de un mensaje audiovisual.
Los activistas beneficiados fueron condenados por bloquear el acceso a clínicas donde se practicaban abortos o por intentar cerrarlas temporalmente.
Organizaciones pro-vida como Students for Life y Americans United for Life habían instado al presidente republicano a ejercer su poder de indulto en su nombre, mediante cartas, mensajes en redes sociales y contactos privados.
La decisión de Trump se sitúa en un momento crucial para el debate sobre el aborto en Estados Unidos.
Tras la eliminación por parte del Tribunal Supremo de la protección constitucional al derecho al aborto en junio de 2022, una docena de estados han restringido o incluso prohibido completamente la práctica.
Estas medidas han provocado un profundo impacto emocional en las mujeres que buscan interrumpir su embarazo y han desatado una ola de protestas a nivel nacional.
El indulto a estos activistas envía un mensaje peligroso al resto del país, afirmó una portavoz de Planned Parenthood, organización defensora del derecho al aborto.
Normaliza el uso de métodos intimidatorios para impedir el acceso a servicios médicos esenciales.
Por su parte, la decisión de Trump ha sido aplaudida por grupos pro-vida que consideran que los activistas beneficiados fueron perseguidos injustamente por defender sus convicciones.
Esta acción del presidente es un acto de justicia, dijo un portavoz de Students for Life.Estos hombres y mujeres lucharon por la vida desde el principio, y merecen nuestro respeto.
La decisión de Trump ha reabierto el debate sobre el papel de la libertad religiosa en la política estadounidense y ha intensificado la polarización social en torno a un tema profundamente sensible.