El Día Mundial de Lucha contra la Depresión, celebrado recientemente, puso en primer plano la importancia de reconocer y abordar este trastorno mental que afecta a millones de personas en todo el mundo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que aproximadamente 280 millones de individuos padecen depresión, un número alarmante que subraya la necesidad urgente de generar conciencia sobre esta enfermedad y brindar apoyo a quienes la sufren.
La depresión está reconocida como un diagnóstico de salud mental desde el siglo XIX, explicó Martín Teruel, secretario de Salud Mental y Adicciones, en entrevista con Radio Salta.
Las condiciones sociales contemporáneas generan circunstancias de vulnerabilidad que pueden predisponer a ciertas personas a experimentar episodios depresivos.
Los factores que contribuyen al desarrollo de la depresión son diversos y complejos, incluyendo traumas como maltrato físico o psicológico, abuso sexual y pérdidas significativas; antecedentes familiares de trastornos del estado de ánimo; consumo de sustancias tóxicas como el alcohol; y comorbilidades con otros trastornos mentales.
A esto se suma el impacto de las condiciones sociales adversas, como la pobreza y la falta de redes de apoyo, que incrementan considerablemente la vulnerabilidad a esta enfermedad.
El secretario Teruel enfatizó la importancia de buscar ayuda profesional ante un cuadro depresivo: Cuando esos estados persisten en el tiempo e interfieren significativamente en la calidad de vida, estamos en presencia de un cuadro depresivo.
Recomendó acudir a hospitales y centros de salud para acceder a profesionales de la salud mental o ser derivados a especialistas si es necesario.
La OMS reporta que aproximadamente el 5% de la población mundial padece depresión o episodios depresivos.
Estos pueden iniciarse tras eventos desencadenantes como pérdidas familiares, desempleo, enfermedades graves u otros traumas.
Si bien la tristeza y la angustia son respuestas naturales ante situaciones difíciles, cuando persisten sin superar pueden afectar negativamente las actividades laborales, académicas, sociales y provocar aislamiento.
En casos extremos, sin intervención adecuada, pueden surgir pensamientos suicidas.
El abordaje terapéutico para la depresión suele involucrar tanto la psicología como la farmacología psiquiátrica, según la severidad del caso.
Teruel destacó la importancia del apoyo del entorno familiar, amigos y compañeros: Las personas que sufren de depresión necesitan sentir el apoyo de quienes les rodean.
Cinco Señales de Alerta:
1.Estado de ánimo depresivo persistente casi todos los días.En niños y adolescentes, puede manifestarse como irritabilidad.
2.Pérdida de interés o placer en actividades que antes disfrutaban.3.Cambios significativos en el peso, apetito o patrones de sueño (insomnio o hipersomnia).
4.Sentimientos de inutilidad, culpa excesiva o dificultad para concentrarse.5.Pensamientos recurrentes sobre la muerte o ideación suicida.
La prevención y el tratamiento efectivo de la depresión son claves para mejorar la calidad de vida de los afectados.
Medidas preventivas:
Mantener rutinas saludables: alimentación balanceada, ejercicio físico regular, sueño adecuado.
Expresar las emociones con seres queridos. Fomentar el apoyo social. Evitar el consumo de alcohol y drogas.
Regular el estrés.
La depresión no es una debilidad, sino una enfermedad mental que requiere atención especializada.
El acceso a servicios de salud mental de calidad, la desestigmatización y el apoyo del entorno familiar y social son esenciales para brindar esperanza y promover la recuperación de quienes enfrentan este desafío.