El gigante tecnológico Google ha dado un paso significativo en la era de la computación cuántica con el lanzamiento de Willow, un procesador cuántico de vanguardia que promete acelerar drásticamente las capacidades de cálculo.
Esta innovación tecnológica permite realizar en solo cinco minutos operaciones matemáticas que a las supercomputadoras más poderosas del mundo les llevarían 10 septillones de años, un período que excede la edad estimada del universo.
Willow, materializado en forma de chip, no es simplemente un procesador cuántico; se trata de una innovación tecnológica que desafía los límites de lo imaginable.
Su rendimiento excepcional se basa en la capacidad de reducir exponencialmente los errores a medida que aumenta el número de cúbits, unidades básicas de información en la computación cuántica.
Esta característica resuelve una barrera crucial que ha obstaculizado el desarrollo de computadoras cuánticas funcionales durante casi tres décadas.
Willow supone un gran salto desde nuestro procesador cuántico de 2019, afirma Hartmut Neven, fundador y director de Google Quantum AI. Este chip nos acerca significativamente a la creación de una computadora cuántica útil a gran escala que pueda aprovechar el poder de la mecánica cuántica para beneficio de la humanidad.
La importancia de Willow radica en su capacidad para abordar uno de los mayores desafíos de la computación cuántica: la corrección de errores.
Los cúbits, al igual que los bits tradicionales, son susceptibles a la decoherencia, lo que significa que pierden información rápidamente al interactuar con el entorno.
Willow ha demostrado que a medida que se añaden más cúbits, la tasa de errores disminuye, acercándose a un comportamiento cuántico puro.
En Willow, hemos visto una reducción significativa en los errores a medida que aumentamos el número de cúbits, explica Neven.
Este es un hito crucial para el futuro de la computación cuántica.
El lanzamiento de Willow marca un punto de inflexión en la carrera hacia la computación cuántica.
Empresas como Microsoft, Amazon e IBM también están desarrollando sus propias plataformas cuánticas, pero Google se posiciona como líder con este avance tecnológico.
Willow es una clara señal de que es posible construir computadoras cuánticas útiles y a gran escala, afirma Neven.
El próximo paso es demostrar un cálculo útil que tenga impacto real en el mundo.
Sudar Pichai, CEO de Google, resalta la importancia de Willow para diversas áreas: Consideramos que Willow es un paso importante en nuestro camino hacia la construcción de una computadora cuántica útil con aplicaciones prácticas en áreas como el descubrimiento de fármacos, la energía de fusión, el diseño de baterías y más.
Willow abre las puertas a un futuro donde los problemas complejos que hoy son insolubles para las computadoras clásicas podrían ser resueltos con rapidez y eficiencia.