El gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, anunció la compra de 34 nuevas ambulancias, una inversión derivada del ahorro generado por la reducción significativa en la atención médica a extranjeros en la provincia.
Esta medida, implementada hace diez meses y que cobró fuerza con la promulgación de una ley nacional similar, ha reducido en un 95% la asistencia a pacientes no residentes, según datos oficiales.
Sáenz celebró el avance del Gobierno nacional en esta línea argumentando que hay que recortar gastos y optimizar recursos; no por otros lados, no por los lugares más sensibles, no con los más desprotegidos.
El gobernador destacó el impacto positivo de la medida en la capacidad de respuesta del sistema sanitario provincial, particularmente en los hospitales del norte salteño.
Ahora los salteños pueden disponer de camas y se acabaron los tours sanitarios, señaló.
Los datos respaldan estas afirmaciones: El Hospital San Vicente de Paul de Orán, el que registraba mayor demanda extranjera, atendió 31.561 pacientes no residentes en 2023.
Desde febrero de 2024, con la aplicación de la ley, se han atendido a solo 77 pacientes extranjeros, lo que se traduce en un ahorro de 2.367 millones de pesos en nueve meses.
En el Hospital Juan Domingo Perón, la reducción fue del 67% y en el de Salvador Mazza del 85%.
Para Sáenz, esta medida no implica negar asistencia a extranjeros en situaciones de emergencia.
En ningún caso el sistema sanitario salteño niega a extranjeros la atención de urgencia o emergencia.
Al ser una cuestión humanitaria, no se la restringe ni niega, independiente de cuál sea la situación migratoria, aseguró.
La provincia de Salta se convirtió en pionera al implementar esta política a partir de la ley Nº 8421, surgiendo del Decreto Nacional N 1292024.
Su éxito ha impulsado su replicación por parte de otras provincias como Mendoza, Jujuy y Santa Cruz.