Un episodio inédito en la Legislatura salteña desató un profundo debate ético y político al impedir el ingreso del ex juez Raúl Reynoso a un homenaje que se realizaría a un reconocido representante cultural de Orán.

La situación, que involucró amenazas de boicot por parte de los legisladores y la intervención de personal de seguridad, expuso una vez más la compleja realidad judicial de la provincia y las tensiones generadas por casos de corrupción.

Reynoso, quien purgó ocho años de una condena de trece por cohecho, aspiraba a compartir el evento con un amigo cercano.

Su presencia en el edificio generó rechazo inmediato entre los diputados, quienes exigieron su retiro bajo amenaza de paralizar la sesión legislativa.

El ex magistrado, quien aseguró estar presente solo para acompañar a su amigo y participar del homenaje al destacado integrante de la cultura oranense, argumentó que tras cumplir con el 23% de la pena por buena conducta, goza de los mismos derechos que cualquier ciudadano.

Estuve siempre trabajando en un grupo cultural vocación de Orán y trabajé 25 años, por eso quería acompañarlo al Tono Vaca, solo eso, declaró Reynoso a un periodista del canal 10, quien también le preguntó sobre su situación procesal.

Al cumplir el 23% puedo circular libremente, ya que es un derecho de cualquier ciudadano, respondió el ex magistrado.

El incidente se produce en un contexto donde la provincia se encuentra inmersa en una profunda crisis judicial.

El actual caso del juez Claudio Parisi, suspendido en sus funciones por dos causas penales (incumplimiento de deberes de funcionario y supuesta recepción de dinero), refleja la preocupación ciudadana y genera incertidumbre sobre el futuro del sistema judicial salteño.

La situación planteada con Reynoso revela las profundas heridas que aún persisten en la sociedad salteña producto de casos de corrupción.

La opinión pública, dividida entre quienes consideran que el ex magistrado tiene derecho a reintegrarse a la vida social y quienes defienden que debe ser excluido de espacios públicos, exige transparencia y justicia para sanar las divisiones generadas por estos hechos.