La comunidad judía de Salta celebró la festividad de Janucá, también conocida como la Fiesta de las Luces, con una ceremonia emotiva frente al Cabildo de la ciudad.
El acto, que contó con la presencia de autoridades religiosas, provinciales y municipales, marcó el encendido del candelabro público, un símbolo icónico que cumple 20 años en la ciudad.
El rabino Rafael Tawil, en su discurso, enfatizó el deseo de la comunidad judía de compartir el mensaje de esperanza y milagro de Janucá con todos los ciudadanos.
Este año, hemos elegido realizar la ceremonia en el corazón de la ciudad para que todos puedan conocer esta hermosa tradición, expresó el líder espiritual.
Tawil también destacó la importancia simbólica del encendido simultáneo del candelabro en diferentes partes del mundo.
En este momento, millones de personas se unen a través de la luz, uniendo corazones y recordando nuestra lucha por la libertad religiosa, añadió.
La festividad de Janucá conmemora la victoria del pueblo judío sobre el Imperio Helénico y la reinaguración del Templo en Jerusalén.
Tawil hizo un paralelo entre esta historia y la resistencia del General Güemes, quien luchó por defender los valores e ideales de Salta.
Al igual que los Macabeos, Güemes defendió su tierra con valentía, afirmó el rabino, recordando la importancia de la lucha contra la opresión.
El ministro de Gobierno, Derechos Humanos y Trabajo, Ricardo Villada, en representación del gobernador Gustavo Sáenz, expresó la felicitación a la comunidad judía por la celebración.
Janucá nos recuerda que siempre hay motivo para seguir adelante, afirmó.Las luces de Janucá son un símbolo de esperanza y libertad religiosa, agregó.
Arianna Benavides, coordinadora general de Cultura de la Municipalidad, hizo un llamado al diálogo interreligioso.
El amor y la empatía son herramientas que nos unen a todos, expresó.
La ceremonia finalizó con una plegaria por el pronto regreso de los 100 ciudadanos israelíes secuestrados, implorando que la luz de Janucá les ilumine en su camino hacia casa.