El mercado cambiario argentino continúa en un estado de volatilidad, con el dólar blue experimentando una pronunciada disminución en su valor en Mendoza tras la intervención reciente del Banco Central.
La divisa paralela se desplomó en cinco pesos respecto a la jornada anterior, marcando un respiro en la escalada que había mantenido durante semanas.
Este repunte se atribuye a las medidas tomadas por el Banco Central, como la compra de divisas y la regulación del mercado cambiario, que buscan estabilizar el peso argentino.
La intervención del Banco Central ha logrado frenar momentáneamente la escalada del dólar blue, afirma un analista financiero de Mendoza.
Se necesita una estrategia a largo plazo para abordar las problemáticas estructurales que afectan a la economía argentina.
El mercado oficial de cambios también registró movimientos significativos.El dólar mayorista subió 2,50 pesos, alcanzando los 1.011,50 pesos.
A lo largo del mes de noviembre, la divisa oficial se ha revalorizado en un 19,50%, reflejando la presión inflacionaria que enfrenta el país.
En contraste con la fluctuación del dólar blue, las reservas internacionales del Banco Central cerraron noviembre con una cifra positiva, acumulando compras por 147 millones de dólares durante la semana y registrando un balance positivo de 1.440 millones en todo el mes.
La compra de divisas por parte del Banco Central es una señal alentadora, señala un economista especializado en mercados cambiarios.
Se necesita un plan integral para aumentar las reservas internacionales a niveles sostenibles.
El dólar MEP cotizó a 1.074,90 pesos, mientras que el Contado con Liquidación CCL operó a 1.107,39 pesos.
Ambas modalidades presentan una brecha significativa con respecto al dólar oficial, lo que evidencia la búsqueda de alternativas por parte de los inversores ante la incertidumbre económica.
La situación actual del mercado cambiario argentino refleja la complejidad de la economía nacional y la necesidad de medidas contundentes para generar estabilidad y confianza en el sistema financiero.
La recuperación económica dependerá, en gran medida, de la capacidad del gobierno para implementar políticas efectivas que aborden las causas estructurales del problema.