El caso de desaparición de María Cash, ocurrido en julio de 2011 en Salta, vuelve a tomar relevancia tras meses de investigación exhaustiva.
A petición del fiscal general Eduardo Villalba, la jueza federal Mariela Giménez ha convocado a declarar a siete testigos vinculados a los últimos momentos previos a la desaparición de la joven diseñadora.
Esta nueva etapa se da luego de que la Fiscalía depurara cientos de pistas recibidas desde todo el país y el extranjero tras la publicación de una recompensa de 5 millones de pesos por información sobre su paradero.
La tarea fue compleja, analizamos más de cien expedientes con 26.400 informes, indicó una fuente del Ministerio Público Fiscal.
El análisis conjunto de fiscales y gendarmes reveló contradicciones e incluso falsedades en las declaraciones iniciales de algunos testigos, aparentemente motivados por la promesa económica.
Este hallazgo ha llevado a la Fiscalía a redefinir el enfoque de la investigación, volviendo al origen de los hechos para reconstruir con precisión lo sucedido.
La desaparición de Cash se remonta a su viaje desde Buenos Aires hacia San Salvador de Jujuy.Su último rastro se ubicó en Salta, donde fue vista por testigos que describieron su estado físico como deteriorado.
Es crucial obtener información precisa y confiable para avanzar en el caso, enfatizó un experto en criminología consultado por este diario.
La re-evaluación de los testimonios y la búsqueda de nuevas pistas son pasos fundamentales para esclarecer lo sucedido con María Cash.