¿Medicamentos sin receta?Salta dice no y defiende su modelo sanitario

El Colegio de Farmacéuticos de Salta ha emitido un contundente rechazo al reciente decreto nacional que permite la venta libre de medicamentos en diversos establecimientos comerciales, afirmando que este no será aplicable en el territorio provincial.

Esta decisión se fundamenta en la vigencia de la Ley Provincial 753908, que establece que la dispensación y venta de cualquier tipo de medicamento debe realizarse exclusivamente en farmacias.

En Salta consideramos los medicamentos como un bien social, no como un producto comercial, afirmó Mario Assad, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Salta.

El decreto nacional atenta contra este modelo y pone en riesgo la salud pública.

Assad explicó que la provincia se mantiene firme en su posición, a pesar de la naturaleza nacional del decreto.

Argumentó que varias otras provincias, como Buenos Aires, Tucumán, La Rioja, Mendoza y Córdoba, también mantienen sus propias leyes que regulan la venta de medicamentos, manteniendo el modelo de farmacia con un rol activo del profesional farmacéutico.

El Colegio de Farmacéuticos ha iniciado acciones para asegurar el pleno cumplimiento de la ley provincial vigente.

En ese sentido, se han programado reuniones con el Ministro de Salud Pública y legisladores locales para ratificar el compromiso de Salta con un modelo sanitario que priorice la salud pública por encima de los intereses comerciales.

No estamos en contra de la venta libre en sí misma, aclaró Assad.La tendencia mundial es hacia ello, pero debemos considerar que al salir de la cobertura de la seguridad social y prepagas, el costo para el paciente aumenta significativamente.

Las farmacias garantizan la seguridad del origen y la correcta conservación de los medicamentos.

El Colegio de Farmacéuticos también ha iniciado una campaña de concientización a comercios locales sobre la vigencia de la ley 753908 y la ordenanza municipal 13.98310, que prohíben la venta de medicamentos fuera de las farmacias.

Esta iniciativa busca reforzar el mensaje de que los medicamentos no son productos comunes y su consumo sin supervisión profesional puede tener graves consecuencias para la salud.