En el corazón de Salta, el Día de la Tradición se convirtió en un escenario vibrante donde la guitarra y el bombo resonaron con pasión.
En el Mercado Artesanal, el grupo Guitarreada Salta reunió a amantes del folclore para una tarde llena de ritmos ancestrales.
Zamba, gato, chacarera y hasta pinceladas carnavaleras se tejieron en una sinfonía que contagió al público, demostrando la arraigada tradición musical que habita en la provincia.
Desde abril, nos juntamos todos los domingos para compartir nuestra música, relata Aranza, administradora del grupo a El Tribuno.
Nuestra propuesta ha crecido y ahora somos un colectivo de alrededor de 20 integrantes: bombistas, guitarristas y vocalistas.
La idea es que cualquiera que quiera sumarse pueda hacerlo.
La convocatoria abierta a cualquier entusiasta musical se convierte en un reflejo de la riqueza cultural que impulsa este movimiento.
Guitarreada Salta no solo busca revivir ritmos tradicionales, sino también crear un espacio de encuentro para jóvenes talentos y mantener viva la memoria ancestral.
En esta línea, Aranza destaca el impacto emocional del folclore: La tradición es parte de mi vida, es eso que se transmite de generación en generación.
Siento que estamos transformando algo a través del espacio cultural.
Para nutrir este legado musical, el grupo organiza El Semillero, una plataforma que invita a niños y adolescentes hasta los 15 años a mostrar su talento vocal.
Cada dos meses, el Mercado Artesanal se transforma en un escenario para estas nuevas voces, demostrando la importancia de transmitir el folclore a las generaciones futuras.
Creemos que el ámbito de la niñez y la adolescencia está un poco olvidado en el folclore, señala Aranza.
A menos que asistan a una academia, pocas oportunidades tienen de mostrar su talento.
Con iniciativas como estas, Guitarreada Salta no solo mantiene viva la tradición musical, sino que también fomenta la identidad cultural y crea nuevas generaciones de amantes del folklore.