La Cámara de Kiosqueros Unidos de Mendoza (CKUM) se encuentra en una situación delicada tras la notificación emitida por el organismo regulador ARCA. La nueva disposición obliga a los kioscos a exhibir la lista de precios de cada marca de cigarrillos, además de recortar drásticamente el margen de ganancia que estos puntos de venta obtienen al comercializar este producto.
Según Gloria, propietaria de dos locales en el centro mendocino, la ganancia por vender cigarrillos y la sanción por incumplir son una amenaza constante.
La medida, argumenta la CKUM, destaca la inviabilidad económica de comercializar este producto debido a las bajas ganancias que se obtienen.
Es inviable comercializar un producto con una renta del 3,5 como la comunicación de ARCA lo expresa, declaró el organismo que agrupa a alrededor de 300 negocios de la provincia.
El cálculo es contundente: un dueño de local que compra mercadería por un millón de pesos, al vender el total, solo obtendría una ganancia de aproximadamente 50.000 pesos.
Un porcentaje mínimo que no compensa los riesgos y las exigencias regulatorias.La situación genera incertidumbre y angustia en los kiosqueros, quienes se ven obligados a tomar decisiones difíciles para su supervivencia económica.
La CKUM, ante la presión ejercida por ARCA, analiza presentar medidas judiciales o buscar otras estrategias para garantizar la comercialización de cigarrillos con ganancias razonables mientras cumplen con sus obligaciones tributarias.
Se propone exigir factura al proveedor de cada marca de cigarrillos para demostrar el precio real de compra y evitar sanciones en caso de inspecciones.
Sugerimos exigirle al vendedor de marcas nacionales factura por los cigarrillos que nos venden y al precio que realmente compramos, ya que en el caso de una inspección tenemos que poder demostrar que lo compramos en blanco y lo vendemos con su respectivo comprobante, expresaron desde la entidad.
La situación es un reflejo del complejo panorama económico actual, donde las pequeñas empresas se enfrentan a presiones regulatorias y al aumento constante de los costos de operación.
El futuro de los kioscos mendocinos que dependen de la venta de cigarrillos pendiente de una resolución favorable para sus negocios.