Un proyecto de ley presentado por el gobernador Gustavo Sáenz busca responsabilizar económicamente a los conductores que, bajo la influencia del alcohol o drogas, causen accidentes automovilísticos.
La iniciativa, destinada a ser debatida en la Legislatura, propone que los responsables de estos siniestros se hagan cargo de los costos de atención médica proporcionada por el sistema público de salud provincial.
Dichas conductas, más allá de las sanciones previstas, merecen que los responsables asuman las consecuencias económicas de la atención médica que demande la situación, afirmó Sáenz, quien enfatizó que la asistencia sanitaria a víctimas de accidentes relacionados con la conducción bajo efectos tóxicos genera un costo significativo para el sistema de salud provincial.
De acuerdo con el proyecto, los conductores responsables no podrán eludir su responsabilidad económica, incluso si se encuentran en situación de insolvencia.
En este caso, deberán cumplir con sus obligaciones mediante la prestación de servicios comunitarios, según lo determine la reglamentación específica.
La obligación de hacerse cargo de los gastos ocasionados por conducir de manera irresponsable no admite excepciones, explicó Sáenz.
El proyecto busca proteger el presupuesto público y garantizar que los contribuyentes no asuman la carga financiera derivada de las imprudencias de algunos conductores.
La iniciativa también busca disuadir la conducción bajo la influencia de sustancias nocivas, al establecer una clara responsabilidad económica por este tipo de accidentes.
La Ley N 5.233 establece un marco legal para el cobro de deudas en casos de falta de pago por parte del conductor responsable.
Ante la inobservancia del pago o incumplimiento del servicio comunitario, se emitirá un certificado de deuda que constituirá título ejecutivo suficiente, permitiendo al estado provincial tomar acciones legales para recuperar los recursos destinados a la atención médica.