Las intensas lluvias que azotaron la provincia de Salta durante la noche dejaron un saldo devastador en el sistema vial nacional.
La Dirección Nacional de Vialidad (DNV) emitió alertas sobre severos daños en diversas rutas, afectando la movilidad y generando preocupación entre los transportistas y ciudadanos.
En la Ruta Nacional 9, crucial corredor que conecta zonas importantes del noroeste argentino, se recomienda extremar precaución en el tramo Puente Wierna La Caldera.
La acumulación de agua en las bermas y la presencia de piedras sobre la calzada representan un riesgo latente para los conductores.
Las condiciones son extremadamente precarias, declaró un portavoz de la DNV. Trabajamos incansablemente para despejar las vías y garantizar la seguridad del tránsito, pero pedimos a los usuarios que extremen sus cuidados y eviten transitar por estas zonas si no es absolutamente necesario.
La Ruta Nacional 51 también sufrió daños considerables en el tramo El Ayba Campo Quijano.En particular, la zona de La Silleta presenta material suelto en la calzada, lo cual aumenta el riesgo de accidentes.
En la Ruta Nacional 68, entre los kilómetros 72 y 86, los equipos de la DNV trabajan arduamente para remover escombros producto de las lluvias recientes.
Las últimas tormentas han sido particularmente intensas, explicó un experto en meteorología.El volumen de agua caída ha generado situaciones difíciles en todo el noroeste argentino, con consecuencias directas en la infraestructura vial.
La situación actual afecta no solo al flujo de transporte de mercancías, sino también a las vidas de los habitantes que dependen de estas rutas para acceder a servicios básicos y realizar sus desplazamientos diarios.
La DNV mantiene un constante monitoreo de la situación y trabaja incansablemente para restaurar el orden en las vías, mientras pide a la población paciencia y colaboración durante este período crítico.