El ministro de Seguridad de Salta, Marcelo Domínguez, anunció una medida inédita con el objetivo de proteger el bienestar mental de los efectivos policiales y penitenciarios.

La nueva normativa establece que todos los agentes deberán someterse a evaluaciones psicológicas anuales, sin importar su rango o cargo, marcando un cambio significativo en la forma de abordar la salud mental dentro del ámbito policial.

Esta decisión surge tras un fin de semana trágico donde se registraron dos muertes en la institución: un sargento falleció por aparente suicidio y un cadete murió en circunstancias que aún se investigan.

Hasta ahora, los exámenes psicológicos se realizaban al momento de ingreso, durante el proceso de formación o antes de ascender de cargo, explicó Domínguez.

Con esta nueva normativa, la revisión psicológica será un requisito obligatorio cada año, involucrando tanto al equipo psicológico interno de la policía como a uno externo.

El ministro resaltó que la medida busca prevenir situaciones críticas y brindar mayor contención a los agentes que enfrentan diariamente altos niveles de estrés y situaciones de riesgo.

Contamos con equipos de psicólogos tanto en la policía como en la escuela de formación y el servicio de emergencias 911; el equipo está disponible las 24 horas del día, puntualizó Domínguez.

Si bien el gobierno salteño ya contaba con profesionales dedicados a la salud mental dentro de la policía, esta medida busca ir más allá, implementando un sistema de monitoreo continuo y proactivo.

No es que nos falten profesionales idóneos, pero vamos a reforzar este control psicológico más allá de las circunstancias particulares de cada hecho, subrayó Domínguez.

El anuncio ha sido recibido con diversos comentarios por parte de expertos en el sector.Es una iniciativa positiva que reconoce la importancia de la salud mental en el desempeño laboral, destacó el psicólogo especialista en trauma, Juan Pérez.

Es fundamental garantizar la confidencialidad y la calidad de las evaluaciones para que los agentes se sientan seguros al acudir a ellas.

La implementación de esta normativa representa un cambio significativo en la gestión del bienestar policial en Salta.

El objetivo final es crear un ambiente laboral más seguro y saludable, donde los agentes puedan desempeñar sus funciones con eficiencia y tranquilidad, sin tener que afrontar el desgaste emocional de manera individualizada.