Si bien Thomas Alva Edison es reconocido por inventar el fonógrafo en 1877, un dispositivo capaz de grabar y reproducir sonidos, los intentos por capturar la voz humana comenzaron años antes.
Édouard-Léon Scott de Martinville, un tipógrafo francés, se adelantó a Edison casi dos décadas con su invento: el fonoautógrafo.
Tal como explica el Museo Nacional de Historia Estadounidense en un artículo de 2016, Scott de Martinville buscaba transformar el sonido en escritura para preservarlo y recordarlo.
Su dispositivo no estaba diseñado para reproducir la voz audiblemente, sino para crear una representación visual de las ondas sonoras a través de líneas onduladas grabadas sobre vidrio o papel.
El fonoautógrafo imitaba la estructura y función del oído humano, señala la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Houston.
El funcionamiento era sencillo: un individuo hablaba o cantaba dentro de un barril, provocando que una aguja vibrante rayara una pista continua en una funda de papel cubierta con hollín, mientras giraba sobre un cilindro.
El fonoautógrafo no logró éxito comercial.Scott de Martinville solo pudo vender unos pocos ejemplares a laboratorios científicos interesados en el estudio del sonido, según relata el Instituto Nacional de la Propiedad Industrial (INPI) de Francia.
Más de un siglo después, en 2008, un grupo de historiadores, músicos e ingenieros de la Universidad de Stanford descubrió antiguas fundas de papel de Scott de Martinville.
Tras un complejo proceso, lograron extraer una grabación audible: Au clair de la lune, una canción infantil francesa.
La grabación, que data del 9 de abril de 1860 y dura diez segundos, se considera la primera grabación de voz humana registrada en la historia a pesar de los efectos del tiempo y la presencia de chisporroteos.
Este descubrimiento nos recuerda que la historia de la tecnología sonora está llena de pioneros que, a menudo, pasan desapercibidos.
La fascinante historia del fonoautógrafo y Au clair de la lune es una prueba tangible de la constante búsqueda humana por capturar y preservar el sonido, un elemento fundamental de nuestra experiencia humana.