La comunidad de Metán Viejo está agitada por un proyecto que promete ampliar los servicios funerarios pero que genera preocupaciones sobre su impacto ambiental y social: la instalación de un horno crematorio.
El Cementerio Parque del Amanecer, ubicado en la zona, impulsa esta iniciativa con el objetivo de satisfacer una creciente demanda de cremación en la región sur de Salta.
Este proyecto busca atender a los clientes habituales del cementerio y también a toda la comunidad regional, explica Evelina García, titular del establecimiento.
Para llevar adelante el plan, se presentó un estudio de impacto ambiental y social realizado por el ingeniero Gustavo De Paul, que fue aprobado sin objeciones.
La empresa asegura que el crematorio estará ubicado a 500 metros de la ruta, en una zona no visible que no afectará el entorno.
Un grupo vecinal se ha manifestado en contra del proyecto, argumentando que su ubicación podría generar contaminación ambiental y falta de transparencia en el proceso decisional.
No podemos hablar de otra cosa que no sea bronca, expresó Fernando Soria, del Centro Vecinal de Metán Viejo, quien cuestiona la falta de consulta previa a los vecinos.
Se hicieron estudios ambientales con lo más respetado de la provincia, pero nosotros, como centro vecinal, nunca vimos una sola hoja, denunció Soria, visiblemente frustrado.
No nos invitaron a participar, eso no se hace.
Soria también criticó la promesa de empleo local, argumentando que se trata de un intento de manipulación y que Metán Viejo está siendo tratado como un área de sacrificio.
Si realmente no contamina, que lo pongan en su casa o en el vivero.Pero no en Metán Viejo, donde hay una escuela y familias, insistió.
El representante vecinal recordó la instalación de una chanchería a cielo abierto durante la gestión del gobernador Juan Manuel Urtubey, denunciando que se están repitiendo errores del pasado.
No queremos permitir que nos impongan un crematorio tan cerca de nuestra comunidad, concluyó Soria.
La empresa promotora del proyecto asegura que el crematorio será una instalación moderna y ecológica, con tecnología de última generación que minimizará la emisión de contaminantes.
El futuro del proyecto aún está por definirse, pero la tensión entre las autoridades, la empresa y los vecinos de Metán Viejo se palpa en el aire.