Un macabro incidente se registró en el Complejo Penitenciario Federal NOA III, ubicado en General Güemes, donde un interno falleció tras sufrir un ataque violento a manos de otro preso.

Las autoridades investigan la responsabilidad del personal penitenciario por su posible negligencia en la prevención del crimen.

Las investigaciones preliminares determinaron que el fallecido, identificado como Brian Ezequiel Flores, de 24 años, cumplía una condena de cuatro años por transporte de estupefacientes.

Su agresor, Rodrigo Ismael González, estaba cumpliendo una sentencia de cinco años por robo agravado por el uso de armas.

La tragedia se desencadenó en la tarde del lunes, cuando los dos internos se enfrentaron a golpes dentro del Pabellón B Funcional 3, sin presencia de guardias penitenciarios.

Las imágenes captadas por las cámaras de seguridad del pabellón revelan cómo la pelea escaló rápidamente cuando González regresó a su celda y, armada con elementos punzantes, atacó nuevamente a Flores.

Pese a que la víctima intentó defenderse con un palo de escoba, las estocadas de González le causaron heridas graves en el tórax y el abdomen.

La fiscal federal subrogante, Josefina Martínez Vázquez, quien investiga el caso, explicó que la muerte de Flores se produjo como consecuencia directa del ataque perpetrado por González.

El juez federal de Garantías N1, Julio Bavio, admitió la imputación penal contra González por el delito de homicidio simple.

Es crucial determinar las responsabilidades del personal penitenciario en este caso, afirmó un abogado especializado en derecho penal carcelario quien pidió mantener su anonimato.

La falta de presencia policial en momentos críticos puede tener consecuencias fatales dentro de una institución como esta.

Este trágico incidente plantea serias interrogantes sobre la seguridad y el control dentro del sistema penitenciario argentino, generando preocupación entre los familiares de los presos, quienes exigen respuestas contundentes por parte de las autoridades.