Un estudio realizado por científicos argentinos ha descubierto una nueva mutación genética en los mosquitos Aedes aegypti, transmisores del dengue, que les confiere resistencia a los insecticidas piretroides, los cuales se utilizan comúnmente para combatirlos.

Este hallazgo, publicado en la revista Parasites Vectors, marca un preocupante giro en la lucha contra esta enfermedad que afecta a miles de personas en el país.

Investigadores del CONICET, la Fundación Mundo Sano y el Instituto Oswaldo Cruz de Río de Janeiro (Brasil) identificaron una mutación específica llamada V410L, además de las ya conocidas F1534C y V1016I, en mosquitos del norte argentino.

Estas mutaciones se han asociado con una alta resistencia a los insecticidas.

Hemos detectado una nueva mutación del ADN en los Aedes aegypti locales y hemos demostrado su relación con la resistencia a los piretroides, explica Laura Harburguer, directora del estudio e investigadora del CONICET. En colaboración con el Instituto Oswaldo Cruz, encontramos estas mutaciones en mosquitos del norte argentino.

Las pruebas realizadas por los investigadores demuestran que los mosquitos con estas mutaciones resisten dosis de insecticidas hasta diez veces superiores a las letales para individuos sin la mutación.

Evaluamos hasta 10 veces las dosis que se utilizan y los mosquitos siguen siendo resistentes, agrega Harburguer.

Esta resistencia plantea un desafío significativo para los programas de control del dengue, ya que las fumigaciones con piretroides, que han sido efectivas en el pasado, podrían perder su eficacia.

Ante este escenario, los expertos recomiendan una estrategia integral de combate al dengue que incluya no solo la utilización de insecticidas como pirimifosmetil, recomendado por la OMS para el control de Aedes aegypti en otros países, sino también medidas como el descacharrado, el control de larvas y la participación comunitaria.