Diputados afines al gobierno provincial aprobaron un proyecto de ley para actualizar la normativa existente sobre partidos políticos, vigente desde 1983.

La iniciativa, que será discutida en el recinto legislativo próximamente, ha generado controversia por la falta de diálogo y consenso con las fuerzas opositoras.

Los promotores del cambio argumentan que la ley 6042, sancionada hace más de cuatro décadas, requiere una modernización debido a las evoluciones políticas y sociales del país.

En este sentido, sostienen que la Constitución Nacional establece a los partidos políticos como pilares del sistema democrático, garantizando su libertad de formación y funcionamiento siempre y cuando se respeten principios democráticos, la representación de minorías, la competencia electoral y el acceso a la información.

De igual manera, se argumenta que la Constitución Provincial reconoce el derecho ciudadano a la asociación política y define a los partidos como instrumentos para la expresión de la voluntad popular en la construcción del Estado.

Por ello, consideran indispensable una regulación legislativa precisa sobre su constitución, organización, funcionamiento y atributos, como el nombre, domicilio, gestión patrimonial y elección de autoridades.

La oposición critica la falta de un proceso participativo y consensuado para modificar esta ley fundamental.

Esta acción unilateral del gobierno representa una clara violación al principio democrático de la concertación, señaló un portavoz de la bancada opositora.

La actualización de la normativa debe ser un proceso inclusivo que involucre a todas las fuerzas políticas para garantizar su representatividad y legitimidad.

Este debate se enmarca en un contexto político marcado por tensiones entre el gobierno y la oposición, donde la figura de los partidos políticos como actores centrales del sistema democrático adquiere mayor relevancia.