El Parkinson, una enfermedad neurodegenerativa que afecta a más de 150.000 personas en España, se caracteriza por síntomas como temblor y rigidez postural, usualmente presentes a partir de los 50 años.
Si bien la genética juega un papel importante, los factores ambientales también influyen en su desarrollo y progresión.
En este contexto, la nutrición cobra una relevancia crucial, ya que puede contribuir tanto a la protección neuronal como a la exacerbación del daño.
Neurólogos del Centro de Medicina NeuroRegenerativa destacan la importancia de una dieta personalizada para pacientes con Parkinson, identificando alimentos permitidos, moderados y restringidos.
Alimentos Recomendables:
Entre los alimentos que se recomiendan incluir en la dieta se encuentran carnes blancas como pollo y pavo, pescados, lácteos, huevos y derivados.
Igualmente, cereales integrales, patatas, legumbres, hortalizas y verduras crudas, frutas frescas, caldos desgrasados, infusiones suaves, zumos naturales, agua, grasas saludables como el aceite de oliva, mantequilla y frutos secos, miel, salsas a base de vegetales y mermeladas con bajo contenido en azúcar se consideran esenciales.
Moderación en Algunos Alimentos:
Existe un grupo de alimentos que, si bien no están totalmente prohibidos, deben consumirse con moderación y ocasionalmente.
Esta categoría incluye la mayonesa, nata, gelatinas, salsas comerciales elaboradas, bollería suave y bebidas refrescantes azucaradas.
Alimentos a Evitar:
Los expertos advierten sobre el consumo de carnes grasas como pato, cerdo y ternera, así como carnes curadas o ahumadas, charcutería, patés y salchichas.
También se recomienda limitar los pescados adobados, vísceras, escabeches y salazones.Las frutas escarchadas y confitadas, las bebidas alcohólicas y estimulantes como el café, el aceite de coco, la manteca de cacao, el tocino, los sebos, las comidas rápidas y los dulces con rellenos o soluciones azucarados también deben ser consumidos con precaución.
La dieta juega un papel fundamental en la gestión del Parkinson, afirma el doctor Juan Pérez, neurologo del Centro de Medicina NeuroRegenerativa.
Al elegir alimentos nutritivos y evitar aquellos que puedan agravar los síntomas, podemos contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas con esta enfermedad.
Las recomendaciones dietéticas para el Parkinson se basan en evidencia científica y buscan minimizar los efectos negativos de la enfermedad.
La elección de una dieta adecuada puede ser un factor clave en el manejo del Parkinson y en la mejora del bienestar general de los pacientes.