Salta se prepara para conmemorar una vez más el Día de la Virgen del Milagro, una festividad religiosa profundamente arraigada en la historia y devoción de la ciudad.

Este año, la celebración se intensifica con la llegada de peregrinos desde diferentes regiones, trayendo consigo una atmósfera cargada de fervor y tradición.

Hace 332 años, según la creencia popular, la imagen de la Virgen del Milagro le suplicó a su hijo que interviniera para detener los devastadores terremotos que azotaban Salta.

Desde entonces, el triduo del Milagro se ha convertido en una de las manifestaciones de fe más importantes del país, atrayendo a miles de fieles cada año.

Este viernes, la ciudad fue envuelta en un mar de cánticos y bailes con la llegada de los peregrinos de La Merced, quienes transportaron a la Catedral Basílica la imagen del Señor de Sumalao, patrono del Valle de Lerma.

Su presencia simboliza la devoción de miles de trabajadores rurales que veneran al santo.
La llegada del Señor de Sumalao es un momento especial, pues marca el inicio oficial de las festividades, comentó el padre Juan Pérez, párroco de La Merced.

Es una muestra del profundo arraigo religioso que existe en Salta y la fe inquebrantable de sus habitantes.

En las próximas horas, se espera la llegada de 500 peregrinos provenientes de Cachi, quienes completarán su larga travesía hacia la capital provincial.

Su arribo culminará el proceso de reunión de los fieles, que se congregarán para venerar al Señor y a la Virgen del Milagro.

El fervor religioso que caracteriza a estas celebraciones trasciende lo meramente espiritual, impactando profundamente en la vida social y cultural de Salta.

La llegada de peregrinos provenientes de diferentes puntos del país genera un dinamismo económico significativo, impulsando el sector turístico y generando una atmósfera festiva que se extiende por toda la ciudad.