Mantener una nevera y un congelador limpios y desinfectados es crucial no solo para la salud, sino también para el correcto funcionamiento y durabilidad de estos electrodomésticos.

Expertos en el sector recomiendan una limpieza profunda cada tres meses para prevenir malos olores y evitar la formación de moho.

La limpieza regular de la nevera es esencial para garantizar un ambiente sanitario y prolongar la vida útil del aparato, afirma Elena Martínez, experta en electrodomésticos de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

Existen diversas opciones para limpiar estos electrodomésticos.Las soluciones caseras a base de vinagre de limpieza, bicarbonato o limón mezclados con agua son efectivas, explica Martínez.

El mercado ofrece productos específicos diseñados para esta tarea.

La OCU detalla un paso a paso para una limpieza integral:

1.

Desvacíar y desconectar la nevera.2.Limpiar el serpentín trasero: La acumulación de polvo y suciedad en este punto afecta al rendimiento del aparato.

3.Cuidar las gomas de la puerta: Estas son puntos clave para evitar fugas de frío y mantener una temperatura interna adecuada.

4.Limpiar las superficies externas: Incluyendo puertas, laterales y parte superior.
5.Desmontar estanterías y accesorios: Lavarlos con agua y jabón para eliminar residuos de comida.

6.Fregar el interior: Utilizando un producto limpiador suave y una esponja o paño.7.Limpiar el congelador: Utilizar la misma solución que para la nevera, teniendo cuidado al descongelar hielo sin utilizar objetos afilados.

Es importante recordar que un aparato limpio funciona mejor, concluye Martínez.Además, evita posibles problemas de salud relacionados con la contaminación bacteriana.