El próximo sábado se llevará a cabo un cambio de hora en el territorio continental chileno.Según el Decreto 224 emitido por el Ministerio del Interior y Seguridad Pública, se pasará al horario de verano UTC 3, avanzando los relojes una hora, a las 01:00 de la madrugada, tras marcar las 23:59.
Esta medida, que busca aprovechar al máximo la luz solar durante el día, excluye a la región de Magallanes y la Antártida chilena.
El cambio horario en Chile fue aprobado en el año 2022 con el objetivo de optimizar el uso de la energía lumínica y reducir el consumo energético, tal como lo hacen otros países en la región como Paraguay desde 1972.
No todos los expertos coinciden en sus beneficios.
Si bien se busca mejorar la eficiencia energética y aprovechar la luz solar, estudios demuestran que el impacto real es mínimo y puede generar disrupciones en los patrones de sueño y la salud general de la población, afirma doctora Ana Sofía Pérez, especialista en cronobiología.
A nivel internacional, Estados Unidos también aplica cambios horarios con fines similares, mientras que Argentina, Colombia, Uruguay y Bolivia, entre otros países, mantienen un huso horario fijo durante todo el año.
Este último grupo se une a los 174 países que no modifican su horario de forma regular.
La adaptación al cambio horario puede resultar compleja para algunos individuos.
Para facilitar el proceso, los dispositivos electrónicos cuentan con sistemas automáticos de ajuste.
Aquellos usuarios que necesiten realizar el cambio manualmente pueden hacerlo en la configuración de Fecha y Hora dentro de sus dispositivos iOS o Android.
El debate sobre la conveniencia del cambio de hora continúa abierto, con argumentos a favor y en contra.
La decisión final recae en los gobiernos, quienes deben evaluar cuidadosamente las posibles consecuencias de esta medida para su población.