Ante la reciente liberación del precio del gas envasado por parte del gobierno nacional, la provincia de Salta tomó una drástica decisión para proteger a miles de familias de un aumento económico significativo.
El secretario de Participación Ciudadana y Relaciones con la Comunidad, Iván Mizzau, explicó en el programa Somos la Mañana las acciones implementadas bajo la dirección del gobernador Gustavo Sáenz.
Si no hubiéramos intervenido, el costo de la garrafa social podría haber alcanzado entre 18.000 y 20.000 pesos, pero hemos logrado regular esta situación, limitando la suba a un 35%, afirmó Mizzau.
El pasado domingo, el gobierno nacional anunció que dejaría de establecer topes máximos para el costo del gas envasado, permitiendo a las empresas fijar libremente los precios de comercialización.
Esta medida generó preocupación en Salta, donde una gran cantidad de familias dependen del gas envasado como principal fuente de energía para cocinar y calentar sus hogares.
En respuesta al anuncio nacional, el gobierno provincial inició un proceso de diálogo con distintos actores involucrados, incluyendo representantes de las empresas proveedoras y organizaciones sociales.
Como resultado de estas negociaciones se acordó mantener el precio de la garrafa social estable hasta finales de octubre.
A partir del lunes, la garrafa social, que costaba alrededor de 10.000 pesos, tendrá un nuevo precio de 13.500 pesos en todos los puntos de distribución de la provincia.
Este mismo precio se aplicará a la garrafa comercial, buscando garantizar el acceso al recurso para todos los consumidores.
La medida implementada por la provincia busca mitigar el impacto económico que la liberación del precio del gas envasado podría tener sobre las familias salteñas, especialmente las más vulnerables.
La decisión ha sido aplaudida por diversos sectores sociales que resaltan la importancia de garantizar el acceso al gas a un costo razonable para evitar una crisis social.
Esta medida es crucial para proteger a las familias salteñas que dependen del gas envasado, afirmó una representante de una organización comunitaria dedicada a la defensa de los derechos de los consumidores.
El aumento del precio del gas podría tener consecuencias devastadoras para muchos hogares, especialmente aquellos con ingresos bajos.