El intendente de Campo Quijano, Lino Yonar, ha solicitado una auditoría exhaustiva a la gestión anterior del exintendente Carlos Folloni, presentando un informe detallado que señala diversas irregularidades financieras y administrativas.

La Municipalidad confirmó que se iniciarán acciones legales, tanto civiles como penales, en caso de que el informe final de la Auditoría General lo aconseje.

Las observaciones realizadas por la auditoría interna abarcan el período 2023 y revelan un saldo negativo de 158.679.406,06 en los resultados financieros.

Se detectó una deuda total de 63.101.084,07, cifra que difiere del monto reportado por el exintendente Folloni.

En el ámbito de las obras públicas, la auditoría no encontró documentación que respalde la realización de estudios de factibilidad, presupuestos o procedimientos de contratación, ni registros de gastos en maquinaria o herramientas.

Otra irregularidad relevante se refiere al destino de los subsidios, los cuales, según el informe, fueron destinados a empleados municipales en lugar de a personas con bajos recursos económicos.

Ariel Gallardo, expresidente del Concejo Deliberante, ha criticado la lentitud en la acción por parte del actual intendente, señalando que un informe de auditores externos sobre irregularidades ya existía desde febrero del presente año.

Estamos hablando de cuatro años de gestión con irregularidades, no solo de 2023, afirmó Gallardo.

El exconcejal instó a Yonar a presentar denuncias ante la justicia sin esperar los resultados de la Auditoría General, destacando la urgencia de transparentar la situación y asegurar que toda la documentación llegue a las autoridades competentes.

La investigación sobre las irregularidades en la gestión anterior tiene el potencial de generar un impacto significativo en la comunidad de Campo Quijano, y se espera que se esclarezcan los hechos para garantizar transparencia y rendición de cuentas en la administración pública.