La Franja de Gaza está sumida en una espiral de violencia tras nuevos ataques israelíes que han dejado al menos 37 palestinos muertos, según fuentes médicas palestinas.

Los bombardeos se concentraron principalmente en el sur del enclave, especialmente en Jan Yunis, donde hospitales han reportado la llegada de 32 cadáveres en las últimas horas.

El Ejército israelí ha ordenado nuevas evacuaciones en el centro de Gaza, incluyendo zonas como Deir al Balah y el campo de refugiados de Maghazi, anticipando una ofensiva terrestre.

Esto reduce considerablemente la zona segura para civiles, que ocupa apenas el 9,5% del territorio gazatí.

Les pedimos que, por su seguridad, evacúen inmediatamente y se trasladen a la zona humanitaria, declaró Avichay Adraee, portavoz del Ejército israelí.

Los ataques han provocado escenas de horror, como el bombardeo en Al Amal, oeste de Jan Yunis, donde murieron once personas, incluyendo cuatro niños.

Un ataque con drones en Katiba dejó otras ocho víctimas.En la misma zona, cinco personas perdieron la vida al ser atacadas mientras viajaban en un tuktuk motorizado.

Las autoridades gazatíes denuncian que el área humanitaria, que antes abarcaba 230 kilómetros cuadrados, se ha reducido a tan solo 35 km².

Del alto número de víctimas mortales, las comunidades se enfrentan a la dramática situación humanitaria con miles de personas desplazadas.

Las enfermedades infecciosas y cutáneas se propagan rápidamente entre los desplazados que viven en campos saturados y sin acceso adecuado a agua potable, saneamiento o higiene.

Mientras la violencia persiste, una delegación de Hamas viaja a El Cairo para reunirse con los mediadores, Catar y Egipto, en un intento por lograr un alto el fuego.

No se trata de una nueva ronda de negociaciones, sino que simplemente vamos a escuchar a los mediadores, declaró Mahmud al Mardawi, dirigente de Hamás al canal Al Quds News, no vemos sentido a reabrir conversaciones sobre asuntos ya acordados.

Hamas acusa al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de imponer nuevas condiciones para un alto el fuego definitivo, como mantener la presencia militar en zonas estratégicas y no comprometerse con un cese total de hostilidades.

El grupo islamista se niega a aceptar una nueva propuesta estadounidense que consideran beneficia únicamente a Israel y exige el cumplimiento del acuerdo alcanzado en julio, que incluía la retirada de las tropas israelíes de Gaza.

La situación en Gaza sigue siendo crítica, con un alto número de víctimas mortales, una crisis humanitaria sin precedentes y un estancamiento en las negociaciones para un alto el fuego.

El mundo se mantiene expectante ante el desarrollo de los acontecimientos y la posibilidad de que se llegue a una solución pacífica.