Sam Altman, CEO de OpenAI y uno de los padres de la revolucionaria inteligencia artificial ChatGPT, ha generado expectación en las esferas empresariales y tecnológicas con su singular consejo para alcanzar el éxito.

En una conversación con el magnate Bill Gates, Altman reveló que la clave reside en la audacia de pedir directamente lo que se desea.

Lo que hay que hacer es pedir exactamente lo que uno quiere, afirmó Altman, quien considera que muchas personas evitan formular sus deseos por miedo al rechazo.

Esta postura simple pero contundente contrasta con el enfoque tradicional de elaborar planes detallados y buscar estrategias indirectas para alcanzar objetivos.

Este método no es una idea novedosa para Altman.Ya en 2019, en un artículo titulado Cómo tener éxito publicado en su blog, expuso la base de esta filosofía: Un gran secreto es que uno puede moldear el mundo según su voluntad un porcentaje sorprendente del tiempo; la mayoría de las personas ni siquiera lo intentan y simplemente aceptan las cosas tal como son.

Altman argumenta que la capacidad humana para influir en los eventos es mayor de lo que muchos creen.

La autoduda, la falta de perseverancia y el bajo esfuerzo se erigen como obstáculos para que la mayoría alcance su verdadero potencial.

Pedí lo que deseás.Por lo general, no lo vas a conseguir, y a menudo el rechazo será doloroso.Pero cuando esto funciona, funciona sorprendentemente bien, aconsejó el CEO de OpenAI.

Para Altman, la persistencia es crucial para que la suerte se incline a favor del individuo.

Casi siempre, las personas que dicen Voy a seguir adelante hasta que esto funcione, y sin importar cuáles sean los desafíos, los voy a superar, y lo dicen en serio, logran tener éxito.

Son lo suficientemente persistentes como para darse la oportunidad de que la suerte les favorezca.
Esta propuesta audaz de Sam Altman ha generado debate entre expertos y usuarios por igual.

Si bien algunos ven en ella una estrategia válida para romper barreras y alcanzar objetivos ambiciosos, otros la consideran poco realista y potencialmente contraproducente.