La provincia de Salta enfrenta una preocupante realidad vial, marcada por cifras alarmantes y un saldo de vidas truncas.
A lo largo del presente año, se han registrado 87 muertes a causa de accidentes de tránsito, con motocicletas como protagonistas en la mayoría de los casos fatales.
Este panorama preocupa a las autoridades de Seguridad Vial, quienes señalan una grave falta de conciencia sobre las normas de seguridad vial y un aumento de riesgos relacionados con el exceso de velocidad, la conducción bajo la influencia del alcohol y la ausencia de elementos de protección personal.
Estamos hablando de 87 familias que perdieron a un ser querido, lamenta Adrián Sánchez Rosado, Director de Seguridad Vial de la Policía, quien enfatiza la magnitud del problema.
No solo afecta a la familia directa de la víctima, sino también al victimario y su entorno. Es un dolor profundo para toda la comunidad.
Las estadísticas reflejan una tendencia preocupante: en lo que va del año se han contabilizado 1.977 siniestros viales, con una participación mayoritaria de motocicletas.
El análisis revela que más del 55% de los accidentes mortales involucran estos vehículos, muchas veces conducidos sin casco protector.
Hay lugares en el interior donde prácticamente no usan el casco, denuncia Sánchez Rosado.
La falta de cultura vial y el incumplimiento de las normas son factores clave que contribuyen a esta crisis.
Los expertos advierten sobre la necesidad de implementar medidas contundentes para sensibilizar a los conductores sobre la importancia del uso del cinturón de seguridad, la prohibición del alcohol al volante y la obligatoriedad del casco en motocicletas.
El Director de Seguridad Vial destaca la labor conjunta con la Policía Municipal de Tránsito para reforzar el control vehicular en zonas estratégicas como la avenida Paraguay, ruta 21, 26, 33, 23 y la rotonda de San Pablo.
Reconoce que los recursos son limitados y se requiere mayor compromiso por parte de la sociedad.
La situación en Salta exige una respuesta contundente del gobierno provincial, a través de campañas educativas integrales, un incremento en la cantidad de controles viales y la implementación de sanciones más severas para quienes incumplan las normas de tránsito.
Es imperativo actuar con urgencia para evitar que más familias se sumen al dolor ineludible de perder un ser querido en un accidente vial.