La endometriosis, una condición ginecológica que afecta a entre un 10% y un 15% de las mujeres en edad fértil, se ha convertido en un tema de creciente preocupación por su impacto significativo en la calidad de vida de quienes la padecen.
Este trastorno complejo se caracteriza por el crecimiento del tejido similar al revestimiento del útero (endometrio) fuera del mismo, afectando órganos como los ovarios, trompas de Falopio y vejiga.
A diferencia del endometrio interno, este tejido no es expulsado durante la menstruación, provocando inflamación, formación de cicatrices y posibles quistes.
Los síntomas son muy variados y pueden incluir dolor pélvico intenso durante la regla, dismenorrea (dolor menstrual), dolor durante las relaciones sexuales, al orinar o defecar, sangrado abundante o irregular, fatiga crónica e incluso problemas de fertilidad, explica el Dr. Juan Pérez, ginecólogo especialista en endometriosis del Hospital Ribera Povisa.
Es crucial un diagnóstico temprano para evitar que la enfermedad avance y afecte severamente a la salud femenina.
A pesar de su prevalencia, aún no se conocen las causas exactas de la endometriosis.Se cree que una combinación de factores genéticos, hormonales e inmunológicos juega un papel fundamental en su desarrollo.
La menstruación retrógrada (donde parte del flujo menstrual regresa por las trompas de Falopio) y los desequilibrios hormonales se consideran algunos de los factores asociados a esta condición.
El impacto emocional y psicológico de la endometriosis no debe subestimarse, afirma María González, presidenta de la Asociación Estatal de Afectadas de Endometriosis (Adaec).
Muchas mujeres se sienten aisladas, frustradas e incluso deprimidas debido al dolor crónico y las dificultades para llevar una vida normal.
La endometriosis puede complicar la concepción.El tejido cicatricial y las adherencias en los órganos pélvicos pueden dificultar la fecundación o el desarrollo del embrión.
Es importante destacar que muchas mujeres con endometriosis conciben de forma natural o mediante tratamientos como la fertilidad asistida.
Existe una gran esperanza para las pacientes con endometriosis, asegura el Dr. Pérez.Gracias a los avances médicos y al apoyo de asociaciones como Adaec, hoy en día contamos con una amplia gama de opciones terapéuticas que pueden aliviar los síntomas, mejorar la calidad de vida y ayudarlas a cumplir su sueño de ser madres.
En definitiva, la endometriosis es un desafío para las mujeres que la padecen, pero no una sentencia.
El diagnóstico temprano, el tratamiento adecuado y el apoyo emocional son claves para enfrentar esta condición con fortaleza y esperanza.